A medida que la industria del cannabis y sus sectores asociados han ganado una creciente aceptación social y legal, estas empresas han comenzado a enfrentar un problema que ha estado afectando a las empresas tradicionales de bienes de consumo empaquetados en el estado de California durante décadas: las afirmaciones de la Propuesta 65.
La Proposición 65 es una iniciativa de California aprobada por los votantes en 1986 y convertida en ley como la Ley de Control de Tóxicos y Agua Potable Segura. La ley requiere que California publique una lista de sustancias que el estado de California sabe que causan cáncer o daños reproductivos. La ley prohíbe la exposición “a sabiendas e intencionalmente” a una de las sustancias de la lista sin proporcionar primero una advertencia “clara y razonable”. Para cumplir con la Proposición 65, las empresas deben proporcionar a los consumidores una advertencia de conformidad con la Proposición 65, a menos que puedan asegurarse de que su producto no exponga a los consumidores a una sustancia enumerada en niveles que puedan causar cáncer o daños reproductivos.
Actualmente hay más de 950 sustancias en la lista de la Proposición 65. Lo más relevante para la industria del cannabis es que California ha incluido el humo de cannabis/marihuana como carcinógeno y tóxico para la reproducción, y el delta-9-tetrahidrocannabinol (THC) como tóxico para la reproducción.
En los últimos diez años, los demandantes de la Proposición 65 han puesto su mirada en la industria del cannabis, emitiendo más de 200 avisos de violación por una variedad de productos químicos en productos, desde flores de marihuana fumables hasta aceite de CBD, y vape pens hasta productos de cuidado personal a base de cáñamo. Si bien hubo picos en la cantidad de avisos emitidos en 2014 y 2017, ha habido un aumento lento en las reclamaciones relacionadas con productos de cannabis desde 2018.
Si bien la mayoría de los avisos se enfocan en algunas sustancias obvias enumeradas en la Proposición 65, por ejemplo, humo de marihuana y THC, también hay avisos que alegan que los productos de cannabis exponen a los consumidores a sustancias como beta-mirceno, plomo, carbaril, monóxido de carbono, hollín, alquitranes. y aceites minerales.
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- A medida que los productos de cannabis se generalicen cada vez más, las empresas se enfrentarán a un número cada vez mayor de reclamaciones de los demandantes.
- Los productos de cannabis pueden causar exposiciones a sustancias en la lista de la Proposición 65 más allá de sustancias obvias como el humo de cannabis o el THC.
- Las empresas deben asegurarse de que sus programas y políticas de cumplimiento aborden los problemas de la Propuesta 65.
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